Una de las mejores experiencias de estas vacaciones ha sido acampar con princesilla y pirata. Dos noches todos juntos en la tienda de campaña que ellos mismos ayudaron a montar y desmontar; hinchar los colchones; las excursiones nocturnas hasta el baño; fregar los cacharros de las comidas en la fregadera del camping; buscar la postura más cómoda dentro del saco de dormir; largas partidas de fútbolin después de la cena... todo eso ha sido para ellos mucho más alucinante que la piscina climatizada o el parque de los osos que visitamos. Una experiencia para repetir y como os digo uno de los mejores momentos de nuestro verano.
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